El actor de 83 años ya había sido tentado en el 2008 para participar de la versión estadounidense del concurso, aunque finalmente desechó esa posibilidad, así que por el bien de su salud y del buen gusto popular roguemos siga firme en su decisión de continuar evitando el ridículo. La versión Argentina del programa se caracteriza(salvo raras excepciones) por tener en segundo plano el baile, para darnos en su lugar como protagonista el escandalo barato y las agresiones por parte de los en su mayoría dudosamente calificados ¨estrellas¨ que forman parte del show junto a un jurado con lo más bajo del espectáculo del país a la cabeza.
Ya tuvimos suficiente Adam, favor de dejar el batitwist y el bati extinguidor de tiburones de lado:
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